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Jul 19, 2023

Traje la gloria del Mundial a España, para poder besar a quien quiera

Soy yo, yo, Loco Arrogancia, presidenta de la federación de fútbol de mi país y protectora de las partes masculinas de las falsas feministas. Escribo en protesta para preguntar: ¿Qué chica no querría que la besaran?

Soy yo, yo, Loco Arrogancia, presidenta de la federación de fútbol de mi país y protectora de las partes masculinas de las falsas feministas. Escribo en protesta para preguntar: ¿Qué chica no querría ser besada por mí, con mi cara tan hermosa como un trozo de costilla, sin mencionar la línea heroica de mis pantalones?

Estas falsas feministas ven el castigo en mis felicitaciones. Buscan interrogar a un hombre simplemente por apoderarse de sí mismo en un momento de euforia victoriosa y luego apoderarse también de una mujer. ¿No es esto lo que hace naturalmente un machista cuando saborea una victoria en la que no ha tenido ningún papel: agarrarla y agarrarla ahora?

Y de todos modos, ¿qué incidente del Mundial femenino podría ser realmente tan grave? ¿Tan grave que la FIFA debería suspenderme durante 90 días mientras mi país considera despedirme, con mi cabeza bellamente pulida y mis hombros tan fuertes que puedo arrojar a una futbolista sobre ellos como si fuera un saco?

Sí, mis manos encontraron mis pantalones en presencia de la reina y su hija, mientras miraba a mi amigo el entrenador en jefe en el campo como si dijera: "Incluso aquí, en medio de todas estas mujeres gritando, sabemos que estamos los verdaderos reyes”. ¿Pero qué hay de malo en eso, cuando sé que soy el verdadero dictador que creó el triunfo en el campo?

¿Es un beso algo por lo que hay que renunciar? Sí, entonces acerqué a esta joven hacia mí con una presión implacable de mis brazos, mi entusiasmo sobreexcitado, en un abrazo envolvente que no aceptaba un no por respuesta. Fue un abrazo que decía: “Yo también soy un artista aquí y no seré ignorado”. Le pregunté, con tanta suavidad que nunca ves mis labios moverse en el vídeo de la ceremonia de entrega de trofeos, “¿Un beso?” Y puse mis manos muy grandes alrededor de su cabeza y la atraje hacia mi cabeza muy elegante, que se alzaba como un pilar hormonal, o tal vez un hongo, y la encontré en la boca.

¿A quién no le gusta la textura de una seta?

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Me niego a aceptar cualquier delito en un beso momentáneo en la boca, tan espontáneo y eufórico que casi la saca de sus zapatos. Fue completamente mutuo; después de todo, ella guardó completo silencio hasta que dijo que no.

Y luego, en un video posterior al partido, puedes escucharla decir algo como: "Eso fue asqueroso".

Y ahora emite una declaración protestando por mi entusiasmo impulsivo como un acto sexista que no fue consentido por su parte. Ella afirma que yo inventé su permiso, que nunca se llevó a cabo.

No puedo comprender su declaración.

La gente no se da cuenta de cómo yo y los demás hombres de mi federación hemos sufrido a causa de estas falsas feministas. Están tratando de destruirme; todos los jugadores han dicho que dimitirán a menos que me reemplacen. Si sobrevivo profesionalmente, veremos cuántos de ellos vuelven a presentarse por su país. Mientras tanto, mi federación y yo les hemos dicho a estas chavalitas que podemos hacerlas jugar, amenazando con emprender acciones legales contra ellas por su rebelión y su audacia contra mi autoridad.

Entonces puedes ver cómo siempre busco su consentimiento. De todos modos, ¿quién no querría seguir mis órdenes, emitidas desde una mandíbula tan noble y amplia como la de un generalísimo?

Muy bien, sí, los hombres dormimos como si estuviéramos en coma más tiempo que La Bella Durmiente sobre las posibilidades del fútbol femenino en mi país. Pero finalmente nos despertamos y les compramos algunas camisetas. Ahora somos plenamente conscientes de los ingresos y la gloria para nosotras mismas, y cuando ellas sienten nuestra peor parte, las falsas feministas todavía se quejan de la falta de dinero y de los malos métodos de capacitación. Y sobre un entrenador que, dicen, los obligó a mantener abiertas las puertas de su habitación de hotel para poder controlar sus horarios de dormir y les exigió que le dijeran con quién salían.

¿Pero no es eso lo que haces con las hijas?

La federación española de fútbol está en crisis. Esto es lo que necesita saber.

Estas falsas feministas casi parecen pensar que he pisoteado intencionalmente su victoria en la Copa del Mundo con mi ruidosa defensa de “un besito” en la boca y mi negativa a hacer concesiones sobre lo que ven como una conducta sacada directamente de “La fierecilla domada”. ”Hasta que parezco tan tonto y mezquino como sexista. Parecen oler un fuerte almizcle glandular, un mensaje tácito junto con mis señales físicas y verbales, en mi insistencia en que ella está "miente" si dice que no fue bienvenido y que fue ella quien acercó su cuerpo a mí. Un mensaje que dice: “No ganes; No vale la pena porque encontraré una manera de degradarte de alguna manera”. Han convertido la celebración de la Copa Mundial en una acusación de una semana de que todavía hay hombres que gobiernan el juego y que obligarían a las mujeres a obedecer y obligarlas a decir que a ellas también les gustó.

Por mi parte, simplemente intento poner todo y a todos en su lugar.